Hay un refrán que dice “de ilusiones vive el hombre”. Se podría cambiar por de ilusión vive el hincha de Temperley. El comienzo de la temporada se abre el sueño del ascenso a la Liga Profesional por parte de la institución de Turdera. Pero con el paso de las fechas esa idea se va diluyendo.
Desde el descenso en 2018, al Gasolero le costó luchar por un lugar en Primera. Un mal comienzo, condiciona el resto del torneo. El cambio del entrenador en pocas fechas era otro factor, sumada también la salida de un jugador clave en la mitad de la temporada (Ramiro Costa en la 2018-2019 y Matías Castro en la 2019-2020).
Esta vez fue la pandemia, que si bien es algo anormal y afectó a todos los clubes, el Cele no fue la excepción. Tras la suspensión del campeonato pasó de pelear el reducido a nuevamente buscar una plaza para ascender. Se tuvo que renovar el plantel, tras la salida de jugadores importantes.
Era un volver a empezar, que parecía prometedor con una victoria sobre Ferro por la mínima en la fecha inicial. Sin embargo, entre derrotas y empates, el conjunto de Turdera quedó penúltimo en la zona, sin idea a lo que jugaba. Con un equipo que no era sólido en ataque y estaba en falta, con la efectividad al arco rival.
Un equipo que jamás pudo jugar de memoria, ya que no mantuvo el mismo once dos partidos consecutivos. Ya sea por lesiones, infectados de Covid, sanciones o una mera cuestión táctica, Walter Perazzo se vió obligado a tener que realizar al menos una modificación de un encuentro a otro.
Con respecto al entrenador del Cele se verá su continuidad por parte de los que manejan el club. Luego del fin de su contrato en junio de 2020, Waltergol decidió permanecer en el club hasta el final del mini torneo atípico organizado por la AFA. Pero, estará también, en las ganas que tenga de mantenerse en el puesto.
Otro tema a seguir es, ¿cuántos jugadores seguirán en el plantel? Quienes renovarán, quienes se irán. Teniendo en cuenta que el próximo torneo arrancará en las próximas semanas, no tienen mucho margen para poder armar un plantel nuevo. La cantera tendría que jugar un papel clave.
Todo esto, va a depender, de lo que ocurrirá en poco tiempo con respecto a la política del club: las elecciones. El 7 de febrero, los socios deberán ir a las urnas para elegir, si continúa la actual o una nueva comisión directiva, que serán los encargados de sostener o no a Perazzo en el puesto. Además del armado del plantel, punto en el cual han fallado más de lo que han acertado.
Con todo esto, Temperley pronto volverá nuevamente al ruedo con la ilusión de buscar el tan ansiado ascenso y que no sea, una vez más, una difícil tarea volver a subir a la máxima categoría del fútbol argentino.
Por Matías Damián Ocampo / @matias_ocampo
Foto: @TemperleyOK
