Este viernes puede ser un día decisivo para Mauricio Giganti en
Estudiantes: De ganar, podrá respirar y así encaminarse en el torneo, en el
caso de perder su continuidad será analizada.
No corren buenos días en Caseros
y los resultados tampoco acompañan al equipo. Si bien es un plantel
completamente nuevo debido a las muchas bajas que tuvo con respecto al
campeonato pasado, es verdad que ya corrieron siete fechas de la Primera
Nacional y la preocupación no solo pasa por no poder hilvanar una racha de
victorias, sino también por no encontrar ese juego que caracterizaba al Matador.
Las bajas de Neri Bandiera y Juan
Pablo Ruíz Gómez se hicieron sentir y mucho, ya que el entrenador probó
diferentes variantes para ocupar ambos extremos del ataque y ninguno pudo tener
la solidez que le aportaban los futbolistas anteriormente nombrados. El eje
central conformado por Rodrigo Melo y Sebastián González fue el único participe
en todos los cotejos del Pincha de
Caseros.
Las lesiones también afectaron y
mucho al cuadro de Caseros: a día de hoy son seis jugadores los que se
encuentran entre algodones, ellos son: Franco Lonardi (Esguince en el hombro
derecho), Gonzalo Di Renzo (Fractura del quinto metatarsiano del pie derecho),
Juan Requena (lesión en el isquiotibial derecho), Nicolás Fernández (Gonalgia
rodilla derecha), Juan Cruz Randazzo (Esguince tobillo derecho) y por último, y
la más sensible de todas las bajas, Nicolás Rinaldi (Evoluciona bien luego de
la operación que se realizó en la rodilla derecha).
A Estudiantes también le cuesta
jugar de visitante: perdió los últimos seis partidos que disputó en esta
condición y, para desgracia de Mauricio Giganti, es el primer entrenador que
pierde seis encuentros consecutivos fuera de Caseros. Este viernes, a las
17.10, recibe a Deportivo Maipú buscando alcanzar las ocho unidades y así
prenderse en el campeonato.
Por Rodrigo Nebreda/@Rodo_Nebreda
Foto: Prensa Estudiantes.